Capítulo 6.

Narra María:

Salí de la habitación donde estaba con los chicos y al salir me encontré con una multitud de chicas que no me dejaba avanzar, por lo que me quedé en la puerta a esperar a que las chicas se fueran. Estaban esperando a que Magi sorteara las entradas para el concierto privado.
Mientras esperaba a que se despejara un poco oí una conversación detrás de la puerta, una conversación de los chicos.

Narra Blas:
Cuando María salió de la habitación los chicos se pusieron a hablar sobre ella, y yo continué con mis pensamientos y a la vez escuchando sobre lo que decían.

-David: Es muy adorable esta chica, cuando la vi que se había desmayado sentí como si fuera mi hermana y tuviera que cuidarla y protegerla -dijo David.
-Álvaro: Sí, veo que nos ha caído muy bien a todos - miró a todos y después me miró a mi - ¿Y a ti Blas que te ha parecido? No has dicho nada en todo el rato que ha estado María.
-Blas: Bueno, es que estaba pensando en mis cosas y me duele un poco la cabeza -dije yo.
-Dani: Bro, no esquives la pregunta, que te ha dicho que qué es lo que piensas de ella -me volvió a recordar Dani la pregunta.
-Blas: Bueno pues pienso que... -tenía que decir algo, pero no sabía el que- pienso que es muy pija y muy dulce... a mí me gustan más rockera -eso era mentira, pero tenía que decir algo y fue lo primero que se me ocurrió por la cabeza.
-Carlos: ¿Rockeras? ¿A ti? ¿Desde cuando Blasín? -me dijo echándome el brazo por encima.
-Blas: Pues desde siempre... -dije yo muy indeciso - Bueno dejemos el tema y vayámonos a comer.
-Carlos: ¡SIIII A COMER! Me muero de hambre -todos reímos.
-Dani: ¿Y cuando no te mueres tu de hambre cabezón? -le preguntó irónicamente Dani.

Todos cogimos nuestras cosas y salimos de la habitación. Cuando salimos nos encontramos a todas las fans, no pensábamos que siguieran allí. Nos hicimos un par de fotos más con ellas y nos fuimos a comer.

Narra María:

Con que le gustaban más rockeras... Dudo que eso fuera verdad, pero se iba a enterar...

Parecía que se había despejado un poco la sala, así que salí de allí antes de que volvieran a salir los chicos y se dieran cuenta que había escuchado la conversación.

Fui a casa de Lucas, ya que habíamos quedado para comer. Toqué al telefonillo y le dije que bajara.

-Lucas: Guauuuu! Para mí no te pones tan guapa - me dijo mientras me cogía levantándome y me besaba.
-María: ¿Como que no? Me he puesto así de guapa para ti -le dije sacándole la lengua.
-Lucas: Claro... O para un tal Blas - me dijo algo celoso.
-María: No te pongas celoso tonto, si ni si quiera me ha mirado. No he hablado nada con él -le dije algo triste.
-Lucas: ¿No?
-María: Que va... Estaba super raro. He estado hablando con todos menos con él. Estaba apartado de todos ausente.

Pusimos dirección al restaurante y por el camino le conté todo. Lucas empezó como un loco a preguntarme que como estaba y a mirar si me había pasado algo cuando se enteró de que me había desmayado y me echó una broncaza cuando se enteró que fue porque no me dió tiempo a desayunar.

Comimos y le pedí que si podíamos ir de compras. Tenía que encontrar algo que me gustara para el concierto. Lucas me ayudó y finalmente encontré el conjunto perfecto. Entre tienda y tienda formé el conjunto perfecto para dejar a Blas con la boca abierta.

Cuando hice todas las compras eran las seis de la tarde aproximadamente y nos fuimos dirección a la universidad. Hoy era también un día muy importante porque nos daban la nota de selectividad. Estaba bastante nerviosa, porque de esa nota dependía mi futuro y dependía de a donde me podría ir a estudiar.

Llegamos a la universidad en una media hora y ya estaban todos. Todos habían visto sus notas. Habían caras de felicidad y también había caras de llanto. Me daba miedo mirar mi nota.

-Lucía: Hombre si ha llegado ya la parejita -nos dijo dándonos dos besos.
-María: Holiii -les dije dándoles dos besos a todos - Bueno, ¿Habéis mirado ya vuestras notas? -pregunté.
-Elena: Sí tía -me puso cara de lastima.
-María: ¿Que pasa tía?
-Elena: ¡¡Un 9,880 de media tía!! -me dijo saltando.
-María: Joder eres idota, me habías asustado joder... ¿Y los demás?
-Lucía: Todos con muy buena nota. Tira a ver tu nota petarda que se que estas haciendo tiempo para no verla... -me dijo Lucía.
-María: Me da miedo verla...
-Lucía: Hazme caso y ve a verla -me guiñó un ojo.
-Lucas: Vamos anda... -me cogió de la mano y me llevó al tablón de anuncios para ver mi nota.

-María: Mírala tú Lucas que no quiero mirarla... -le dije cerrando los ojos.
-Lucas: ¡No me lo puedo creer! -dijo casi gritando.
-María: ¿Qué? ¿Qué pasa?
-Lucas: ¡Tienes la nota media más alta de todas!
-María: Va Lucas déjate de bromas y dime la nota anda... -le dije sin creérmelo.
-Lucas: ¿No te lo crees? Pues míralo tú misma.
-María: A ver, ¿dónde estoy? -Lucas me señaló donde estaba. No me lo podía creer y me quedé embobada mirando la nota y con la boca abierta. Un 13,780... Tenía que haber un error, los exámenes no se me habían dado tan bien como para sacar esa nota...
-Lucas: ¿Te lo crees ahora? -me preguntó Lucas. Yo estaba tan embobada que no le respondí - ¡María, coño que es tu nota! ¡Que te lo has ganado! -me dijo cogiéndome en brazos y abrazándome.

No me lo podía creer, esto quería decir que podría ir a estudiar donde quisiera. Esto estaba siendo un sueño. Mi verano iba demasiado bien. Estaba con Lucas, había conocido a los chicos, me habían dado una entrada para el concierto privado y ahora la nota más alta de todas... ¡No me lo podía creer!

Para celebrarlo nos fuimos de fiesta. Cada uno se fue a su casa para prepararse y quedaríamos después de cenar.
Esa noche iba a traer muchas, pero que muchas sorpresas.

[Continuará]